Tras unos días de ausencia por falta de motivación hoy me decido a escribir esta entrada. Sobre todo después de ver que tengo lectores nuevos y no quiero que se metan aquí cada día para nada.
Me gusta la gente especial y rara. Esto se suele decir mucho, las personas van por ahí fardando de lo muy especiales que son, lo muy locos que están y gritan su rareza a los 4 vientos continuamente. No, no me refiero a esos, me refiero a los raros que no lo dicen o no lo dicen demasiado. Son personas que aportan algo nuevo, siempre pueden enseñarte nuevos puntos de vista en esta vida loca. Es mágico adentrarse en la personalidad de alguien distinto y buscar y buscar en su cabecita toda su personalidad, aunque a veces cueste muchísimo o aporten más dolor de cabeza que otra cosa. Esa es la pega que veo de las personas especiales, que son tan especiales que pueden ser problemáticas en el trato, pero da igual, me arriesgo.
¿Y quienes son estas personas tan raras? ¿Qué se considera raro? Pues por una parte sin duda lo que esté fuera de las modas y por otra parte lo que nos trasmita a nosotros como algo raro. Para mí las personas raras son las que tienen suficiente personalidad como para no dejarse llevar por las modas, o bien vistiendo, o bien drogándose, con el sexo o cualquier cosa “guay” que se hace hoy en día. Especiales son para mí aquellos con los que puedo mantener conversaciones de horas, aquellos que saben escuchar, aquellos que no solo buscan Lo Único (sexo), aquellos que prefieren leer un cómic manga que emborracharse día sí y día también. Personas que no tienen miedo a expresar lo que sienten, a mostrarse tal y como son. Incluso me gusta las personas tímidas, esas esconden muchísimo y es todo un viaje conocerles. En fin, toda aquella persona que me aporte algo nuevo, aunque sea un poquito. Os preguntareis a cuento de qué viene esto, pues esto viene a cuento de mi reciente visita al Salón del Manga. Eso, eso es lo que me parece ser una persona especial, 22000 personas acudiendo a un sitio lleno de fantasía, dónde poder vestirte como te de la gana, dónde los otros frikis quieren hacerse fotos con el más friki en lugar de huir de él. A pesar de yo ser una persona tímida ese fin de semana me sentí única, por una vez me sentí una rara bien acompañada de raros.
La gente regalaba abrazos, si ibas disfrazado te miraban algunos con admiración y alegría. Jóvenes de todas partes de España te pedían fotos, porque tu cosplay era su ídolo, era con quien había crecido. ¿Y no debe ser la infancia un recuerdo bonito? No todos los días podemos revivir la infancia de esa manera. Y ya no sólo la infancia sino el momento actual. ¿No es bonito que una simple serie de dibujos y un tío disfrazado te haga feliz por unos días?¿No es bonito y sano ser feliz con tan poquito? Estando en la cola del Salón del Manga oí a alguien que dijo: qué raro, ninguna de estas personas que están aquí tiradas en el jardín en grupo…está fumando porros.” Así que queridos, aunque parezca moda ser friki, los frikis (cada uno a su manera) me parecen personas imprescindibles en este mundo de humos. Este acontecimiento duraba 3 días, la gente se preparó disfraces incluso para cada día, la gente pasó allí el día entero con todas las actividades programadas, todos comían allí en los jardines o dónde pillaran. Sin embargo el ambiente era sano! todo sonrisas, abrazos, alegría, personalidad!
Bueno no me enrollo más, yo Alice McGee, pude adquirir algo muy valioso en esos días. Tengo una Death Note, y no dudaré en usarla…
Aquí dejo un link ( ver video) por si a alguien le interesa ver lo que es ser especial
Lo siento mucho pero si Yagami Raito no consiguió salir impune tras usar la death note dudo que tú pudieras conseguirlo. Aunque dudo que haya nadie tan competente como L en este mundo... Sin más, que viva el manga y anime, el frikismo y las personas especiales. Un beso,
ResponderEliminarLas personas que suelen abundar bastante son las simplonas de mente y de corazón. Encontrarte a alguien diferente a ellas es como ver el sol entre las nubes ^^
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